Reflexión de hoy: Poema del aborto

¡Hola mami, mami!, ¿cómo estas?
   - yo, yo estoy muy bien gracias a Dios.
   - Hace apenas unos dias me concebiste en tu pancita.

La verdad, no te puedo explicar lo contento que estoy de saber que tú
vas a ser mi mamá.  Otra cosa que también me llena de orgullo es ver el amor con el
que fui concebido. Todo parece indicar que voy a ser el niño más feliz del mundo.

¡Hola mami, mami!, ya ha pasado un mes desde mi concepción y ya estoy viendo cómo mi cuerpecito se empieza a formar; digo, no estoy tan bonito como tú, pero con el tiempo ya verás cómo me voy a parecer a ti.

Yo estoy muy feliz, sin embargo mami, hay algo que me tiene un poquito preocupado. Últimamente me he dado cuenta que hay algo en tu cabecita que no te deja dormir, pero, bueno, ya se te va a pasar, ¿verdad? No te apures mami, yo te quiero mucho. 

¡Mami, mami!, ya pasaron dos meses y medio, y la verdad, estoy muy feliz con mis nuevas manitas; míralas, mis manitas, míralas. ¡Ay!, tengo muchas ganas ya utilizarlas
para jugar.

¡Mami, mamita!, dime qué te pasa. ¿Por qué lloras tanto por las noches? ¿Por qué cuando papi y tú se ven, se gritan tanto...? ¿ya no me quieren? ¡O qué!

Han pasado ya 3 meses mami y te noto muy deprimida, no entiendo qué pasa, estoy confundido mami. Hoy en la mañana fuimos al doctor y te hizo una cita que... para mañana,
no entiendo mami, yo me siento muy bien, te lo juro...

¡Mami, mami!, ya es de día. ¡Eh! ¿A dónde vamos? ¡Épale mami!, ¿por qué estás llorando otra vez? Mami, no llores, no va a pasar nada... ¡mami, mami!, no te acuestes, mami apenas son las dos de la tarde, es muy temprano para irse a la cama, yo no tengo nada de sueño, sólo quiero seguir jugando con mis nuevas manitas...

¡Épale!, ¿qué es ese tubito que está en mí casita?
A poco es un juguete nuevo. Oigan, oigan, ¿por qué están succionando mi
casa. ¡Mami, mami!, Esperen, ésa es mi manita. ¿Por qué me la están arrancando?
¡Nooo! ¿No ven que me duele mucho? ¡Mami, ayúdame mami!, ¿qué no vez que todavía estoy muy chiquito y no me puedo defender...?

¡Mami, mami!, ésa es mi piernita mami, me la arrancan. Por favor, diles que ya no sigan, te lo juro que ya me voy a portar bien y no te vuelvo a patear en las noches...

- ¿Cómo es posible que un ser humano me pueda hacer esto?, Va a ver cuando sea grande y fuerte. ¡Mami, mami!, ya no puedo más! ¡Mami, mami, ayúdame...! Ya no puedo más...

Mami, han pasado ya diecisiete años desde... desde aquel día, y aún veo cómo todavía te duele esa decisión que tomaste. Por favor, ya no sufras, acuérdate que te quiero mucho
y que aquí te estoy esperando con muchos abrazos y muchos besos para demostrarte cuánto te amo...

Raúl Brindis

No hay comentarios.

Con tecnología de Blogger.